Sus habitantes viven de la agricultura gracias a una amplia llanura costera que permite la producción alimentaria y hortícola (patatas, zanahorias, malangas, ñames, etc.), también abundan los cafetos y los naranjos silvestres. Es en estas tierras donde los amotinados del Bounty se instalaron para esconderse.

Panorámicas excepcionales

Caminata hasta el Monte Taitaa (el pico más alto de la isla) a una altitud de 422 metros que ofrece una vista espléndida de la laguna Tubuai y el Océano Pacífico.
Paseo en bicicleta por la carretera costera, las cálidas y transparentes aguas de su magnífica laguna azul y sus numerosos Motu (islotes) los cuales están llenos de peces tropicales multicolores, almejas y langostas que lo invitan a hacer snorkel y nadar.

El paseo por las magníficas playas de la isla, cuya arena puede variar del blanco al rosa y al ocre, resulta relajante. Los vientos alisios también son favorables para el kitesurf y el windsurf para los amantes de los deportes de tabla.

Una aventura natural y auténtica.

Son numerosos los encuentros con esta naturaleza radiante y generosa. Una maravillosa aventura dentro de los impresionantes paisajes de Tubuai espera a cada visitante.